La influenza es una infección vÃrica que afecta principalmente a la nariz, la garganta, los bronquios y, ocasionalmente, los pulmones. La infección dura generalmente una semana y se caracteriza por la aparición súbita de fiebre alta, dolores musculares, cefalea malestar general importante, tos seca, dolor de garganta y rinitis. El virus se transmite con facilidad de una persona a otra a través de gotÃculas y pequeñas partÃculas expulsadas con la tos o los estornudos. La influenza suele propagarse rápidamente en forma de epidemias estacionales. La mayorÃa de los afectados se recuperan en una o dos semanas sin necesidad de recibir tratamiento médico. Sin embargo, en niños pequeños, personas de edad y personas aquejadas de otras afecciones médicas graves, la infección puede conllevar graves complicaciones de la enfermedad subyacente, provocar neumonÃa o causar la muerte.
SARS-CoV-2 es el virus que causa la enfermedad infecciosa conocida por COVID-19. La mayorÃa de las personas infectadas por el virus experimentarán una enfermedad respiratoria de leve a moderada y se recuperarán sin requerir un tratamiento especial. Sin embargo, algunas enfermarán gravemente y requerirán atención médica. Las personas mayores y las que padecen enfermedades subyacentes, como enfermedades cardiovasculares, diabetes, enfermedades respiratorias crónicas o cáncer, tienen más probabilidades de desarrollar una enfermedad grave. El virus puede propagarse desde la boca o nariz de una persona infectada en pequeñas partÃculas lÃquidas cuando tose, estornuda, habla, canta o respira. Cualquier persona, de cualquier edad, puede contraer la COVID-19 y enfermar gravemente o morir.
El virus sincitial respiratorio, o RSV, es un virus respiratorio común que generalmente causa sÃntomas leves similares a los de un resfriado. La mayorÃa de las personas se recuperan en una o dos semanas, pero el VSR puede ser grave. Los bebés y los adultos mayores tienen más probabilidades de desarrollar VSR grave y necesitar hospitalización. Hay vacunas disponibles para proteger a los adultos mayores del VRS grave. Hay productos de anticuerpos monoclonales disponibles para proteger a los bebés y niños pequeños del VRS grave.
Puede verse afectado cualquier grupo de edad, aunque unos corren más riesgos que otros.
- Las personas con mayor riesgo de enfermedad grave o complicaciones son las embarazadas, los menores de 59 meses, los ancianos y los pacientes con enfermedades crónicas (cardiacas, pulmonares, renales, metabólicas, del desarrollo neurológico, hepáticas o hematológicas) o inmunodepresión (por VIH/sida, quimioterapia, corticoterapia o neoplasias malignas).
- Debido a su exposición a los pacientes, los profesionales sanitarios corren gran riesgo de infectarse por los virus de la gripe y de transmitirlos, sobre todo a personas vulnerables.
La gripe estacional tiene fácil propagación y se transmite rápidamente en entornos como las escuelas y las residencias de ancianos. Al toser o estornudar, las personas infectadas dispersan en el aire, a distancias de hasta 1 metro, gotÃculas infecciosas (con virus), infectando asà a las personas cercanas que inspiran esas gotÃculas. El virus también puede transmitirse por las manos contaminadas. Para prevenir la transmisión hay que lavarse las manos frecuentemente y cubrirse la boca y la nariz con un pañuelo al toser. En los climas templados las epidemias estacionales se producen sobre todo durante el invierno, mientras que en las regiones tropicales pueden aparecer durante todo el año, produciendo brotes más irregulares.
El periodo de incubación (tiempo transcurrido entre la infección y la aparición de la enfermedad) es de unos 2 dÃas, pero oscila entre 1 y 4 dÃas.
- Hay cuatro tipos de virus de la gripe estacional: A, B, C y D. Los causantes de las epidemias estacionales son los virus gripales de tipo A y B.
- Los virus de la gripe A se clasifican en subtipos en función de las combinaciones de dos proteÃnas de su superficie: la hemaglutinina (HA) y la neuraminidasa (NA). Los subtipos actualmente circulantes en el ser humano son el A(H1N1) y el A(H3N2). El A(H1N1) también se conoce como A(H1N1)pdm09, pues fue el causante de la pandemia de 2009 y posteriormente sustituyó al virus de la gripe estacional A(H1N1) que circulaba hasta entonces. Todas las pandemias conocidas han sido causadas por virus gripales de tipo A.
- Los virus de tipo B no se clasifican en subtipos, pero los circulantes actualmente pueden dividirse en dos linajes B/Yamagata y B/Victoria.
- Los virus de tipo C se detectan con menos frecuencia y suelen causar infecciones leves, por lo que carecen de importancia desde el punto de vista de la salud pública.
- Los virus de tipo D afectan principalmente al ganado y no parecen ser causa de infección ni enfermedad en el ser humano.
- La gripe estacional se caracteriza por el inicio súbito de fiebre, tos (generalmente seca), dolores musculares, articulares, de cabeza y garganta, intenso malestar y abundante secreción nasal. La tos puede ser intensa y durar 2 semanas o más. La fiebre y los demás sÃntomas suelen desaparecer en la mayorÃa de los casos en el plazo de una semana, sin necesidad de atención médica. No obstante, en personas con alto riesgo (véase más abajo) la gripe puede ser una enfermedad grave, e incluso mortal.
- La enfermedad puede ser leve, grave o incluso mortal. La hospitalización y la muerte son más frecuentes en grupos de alto riesgo. Se calcula que las epidemias anuales causan 3 a 5 millones de casos graves y 290 000 a 650 000 muertes.
- En los paÃses industrializados la mayorÃa de las muertes relacionadas con la gripe se producen en mayores de 65 años (1). Las epidemias pueden causar gran absentismo laboral/escolar y pérdidas de productividad. Las clÃnicas y hospitales pueden verse desbordados durante los periodos de máxima actividad de la enfermedad.
- No se conocen bien los efectos de las epidemias estacionales en los paÃses en desarrollo, pero las investigaciones indican que el 99% de las muertes de menores de 5 años con infecciones de las vÃas respiratorias inferiores relacionadas con la gripe se producen en esos paÃses (2).
- GuÃa operativa para la vigilancia centinela de la infección respiratoria aguda grave (IRAG); 2014
- Estrategia Mundial contra la Gripe 2019-2030. OMS
- Informe final Consulta ad hoc de expertos en la región de las Américas: retos, brechas y próximos pasos en la vigilancia de COVID 19 y su integración en la vigilancia de influenza y otros virus respiratorios
- Alerta epidemiológica - Influenza, virus respiratorio sincitial y SARS-CoV-2 - 6 de junio de 2023
- «Elaboración del mosaico» Un marco para la vigilancia resiliente de virus respiratorios con potencial epidémico y pandémico
- Vigilancia integrada de la influenza y el SARS-CoV-2 algoritmo de pruebas de laboratorio (Ver también en ±è´Ç°ù³Ù³Ü²µ³Üé²õ)
- Muestras de pacientes sospechosos de Influenza A/H5 ALGORITMO DE PRUEBAS DE LABORATORIO (Ver también en ±è´Ç°ù³Ù³Ü²µ³Üé²õ)
- Toma de muestra respiratoria para diagnóstico de Influenza y otros virus respiratorios - Infográfico
- Pandemia de influenza aviar y humana: abordar la necesitdad de integración entre salud y agricultura en los planes de preparación en América Latina (en inglés)
- Fortalecimiento del trabajo intersectorial para la Influenza en la Interfaz Humano Animal en la Región de las Américas. Mayo 2023: Preguntas técnicas y respuestas. Mayo 2023. (Disponible en inglés)
- Alerta Epidemiológica: Brotes de influenza aviar causados por influenza A(H5N1) en la Región de las Américas
- Fortalecimiento del trabajo intersectorial para la Influenza en la Interfaz Humano Animal en la Región de las Américas: Preguntas Técnicas y Respuestas (Disponible en inglés)
- Informe de la consulta regional para el fortalecimiento del trabajo intersectorial en la interfaz humano-animal de influenza. Marzo 2023
La OPS apoya a los paÃses de la región en la vigilancia, prevención, preparación y control de enfermedades pandémicas y propensas a epidemias a través del desarrollo de estrategias basadas en evidencias para predecir, prevenir, detectar y responder a las amenazas infecciosas. También asegura una vigilancia regional de las funciones relacionadas con estas amenazas.
Grandes lÃneas de acción:
- Enfermedades pandémicas y propensas a epidemias: influenza, MERS, fiebres hemorrágicas y hantavirus, fiebre amarilla y arbovirus emergentes, leptospirosis y meningococemia.
- Redes de expertos e intervenciones de vigilancia y respuesta: epidemiologÃa y modelos, laboratorio, gestión clÃnica y control y prevención de infecciones.